Un gran plato italiano que podemos rellenar con cualquier ingrediente que se nos ocurra (verduras, embutidos, quesos, etc.) y servida recién hecha, es un verdadero manjar.
Es una receta antigua de origen humilde, y como toda receta típica tiene sus métodos tradicionales de realización, pero vamos a ver que también podemos prepararla sencillamente en casa y montar una cena deliciosa que además dejará a todos boquiabiertos.
En un cuenco unimos 500g de harina con 2gr de bicarbonato de soda, agregamos también la mantequilla (75gr) y agua caliente o leche 200cm3 que previamente habremos puesto 1 cucharadita de sal.
Mezclamos con las manos durante unos diez minutos hasta que todos los ingredientes se unan de forma homogénea, colocamos en un recipiente, cubrimos con un paño húmedo y ponemos a reposar la masa durante media hora.
Pasado este tiempo dividimos la masa en 4 cantidades iguales que serán nuestras 4 Piadinas de unos 25 cm.
A continuación estiramos la masa con un palo de amasar, dejando un grosos de 4 a 5 mm, cortar la masa con un cortador del diámetro elegido dejando los bordes lisos.
Calentamos una sartén antiadherente y cocinamos las Piadinas por ambos lados, de forma rápida y a fuego fuerte sin quemarlas.
Durante la cocción (1-2 minutos por cada lado), pinchar con un tenedor, para evitar que se formen burbujas en la superficie.
Una vez cocidas podemos rellenar las Piadinas con los ingredientes que más nos gusten.
Recomendamos servir calientes.